Pasta al ajillo es una receta imprescindible en tu cocina que te transportará a los sabores y aromas de la cocina mediterránea. Esta deliciosa pasta, preparada con una base de aceite de oliva y ajo, es perfecta para aquellos momentos en los que buscas una comida rápida, pero llena de sabor. Su sencillez y versatilidad hacen que la pasta al ajillo sea una opción ideal para cualquier ocasión. Ya sea como plato principal o como acompañamiento, esta receta conquistará a todos los amantes de la cocina italiana. Prepárate para disfrutar de una explosión de sabores con la pasta al ajillo.
¡Delicioso y aromático: pasta al ajillo con un toque irresistible!
- 250 gramos de pasta (espaguetis, fettuccine, linguine, etc.)
- 4 dientes de ajo
- 1/4 taza de aceite de oliva
- 1/2 cucharadita de hojuelas de chile rojo
- 1 cucharada de perejil fresco picado
- Sal al gusto
¡Deléitate con esta deliciosa receta de pasta al ajillo en simples pasos!
Aquí tienes una pequeña guía paso a paso para elaborar pasta al ajillo:
1. En primer lugar, pon agua en una olla grande y añade sal. Lleva el agua a ebullición y luego agrega la pasta de tu elección. Cocina la pasta siguiendo las instrucciones del paquete hasta que esté al dente.
2. Mientras la pasta se cocina, calienta aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio. Agrega los ajos picados y cocínalos hasta que estén dorados y fragantes, aproximadamente durante 2 minutos.
3. Si deseas añadir un poco de sabor extra, puedes agregar chile rojo picado o copos de chile al gusto en la sartén con el ajo. Esto le dará un toque picante a la salsa de ajillo.
4. A continuación, añade los tomates cherry cortados por la mitad a la sartén y cocínalos durante aproximadamente 3-4 minutos hasta que se ablanden un poco.
5. Una vez que la pasta esté lista, escúrrela y reserva un poco del agua de cocción.
6. Agrega la pasta escurrida a la sartén con el ajo y los tomates cherry. Mezcla bien para que la salsa de ajillo cubra uniformemente la pasta.
7. Si la pasta parece un poco seca, puedes agregar un poco del agua de cocción reservada para obtener una salsa más suave y cremosa.
8. Por último, sazona la pasta con sal y pimienta al gusto. También puedes agregar un poco de perejil picado fresco para darle un toque de color y sabor adicional.
9. Sirve la pasta al ajillo caliente y disfruta de este delicioso plato con un poco de pan crujiente.
¡Buen provecho!