Tartas refrescantes y sin horno: Delicias veraniegas listas en minutos
¿Qué mejor manera de disfrutar del verano que con unas deliciosas tartas frías sin horno? Estas opciones son perfectas para aquellos días calurosos donde no queremos encender el horno y preferimos una opción más refrescante. Con ingredientes frescos y sencillos, podrás preparar estas tartas en cuestión de minutos y sorprender a tus invitados con postres irresistibles. ¡Prepárate para disfrutar de estas delicias veraniegas que te mantendrán fresco y satisfecho sin necesidad de encender el horno!
Deliciosas tartas sin horno: una explosión de sabores refrescantes
- 250 gramos de galletas digestive
- 100 gramos de mantequilla derretida
- 500 gramos de queso crema
- 200 gramos de azúcar
- 250 ml de nata para montar
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla
- 1 sobre de gelatina sin sabor
- 100 ml de agua
- 200 gramos de frutas frescas (fresas, kiwi, mango, etc.)
- 2 cucharadas de mermelada de frutas
Deliciosas tartas frías sin horno: ¡sin complicaciones ni calorías extra!
Aquí tienes una pequeña guía paso a paso para elaborar una tarta fría sin horno:
1. Tritura las galletas hasta obtener una textura de migas finas. Puedes utilizar una licuadora o meter las galletas en una bolsa de plástico y aplastarlas con un rodillo.
2. En un recipiente, mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta obtener una masa compacta.
3. Coloca la masa de galleta en la base de un molde desmontable y presiona bien con los dedos para que quede uniforme. Reserva en el refrigerador mientras preparas el relleno.
4. En otro recipiente, bate la crema de leche hasta que empiece a espesar. Agrega el azúcar y la esencia de vainilla y continúa batiendo hasta obtener picos suaves.
5. En otro recipiente aparte, mezcla el queso crema con el azúcar glass hasta que estén bien incorporados.
6. Incorpora la crema batida a la mezcla de queso crema y azúcar glass, utilizando movimientos suaves y envolventes para que la mezcla no pierda aire.
7. Vierte la mezcla sobre la base de galleta en el molde y alisa la superficie con una espátula.
8. Cubre la tarta con papel film y refrigera durante al menos 4 horas, o hasta que esté bien firme.
9. Pasado el tiempo de refrigeración, decora la tarta con frutas frescas, chocolate rallado o cualquier otro topping de tu elección.
10. Desmolda con cuidado y sirve fría.
¡Disfruta de tu deliciosa tarta fría sin horno!